¡25 Recetas con Acelgas que Te Harán Amarlas!

¿Acelgas? ¡Sí, acelgas! Esa verdura de hojas verdes y tallos crujientes que a menudo pasamos por alto en el supermercado. Hoy vamos a cambiar esa historia. Prepárate para descubrir un mundo de sabor y posibilidades con estas 25 recetas con acelgas que son tan fáciles como deliciosas. Olvídate de las verduras aburridas, porque te vamos a demostrar que la acelga es la protagonista secreta que tu cocina ha estado esperando. ¡Vamos a cocinar!

¿Por Qué Deberías Comer Más Acelgas? ¡La Ciencia Responde!

Antes de ponernos el delantal, hablemos un poquito de por qué las acelgas son una maravilla. No es solo cosa de abuelas, ¡la ciencia lo confirma! Estas hojas verdes son una bomba de nutrientes. Son como un multivitamínico pero en versión natural y mucho más sabrosa.

Un estudio publicado en el Journal of the American College of Nutrition destaca que una dieta rica en verduras de hoja verde, como las acelgas, está directamente relacionada con un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Según los investigadores, “los nitratos y la fibra presentes en las verduras de hoja verde contribuyen a mejorar la salud arterial y a reducir la presión sanguínea”. ¡Así que comer acelgas es como darle un abrazo a tu corazón!

Tabla Nutricional de la Acelga (por cada 100g cocidos)

Nutriente	Cantidad Aproximada	% Valor Diario Recomendado
Calorías	20 kcal	1%
Vitamina K	327.3 mcg	273%
Vitamina A	6,124 IU	122%
Vitamina C	18 mg	22%
Magnesio	86 mg	21%
Hierro	2.26 mg	13%
Fibra	2.1 g	8%

Como puedes ver, con solo un poquito de acelga, ¡le das a tu cuerpo un empujón increíble de vitaminas y minerales! Ahora sí, con esta motivación extra, ¡a la cocina!

1. Tortitas de Acelga y Queso (¡Las favoritas de los niños!)

Estas tortitas son la forma perfecta de “esconder” verduras para los más peques de la casa. Son suaves por dentro, doraditas por fuera y absolutamente irresistibles.

Ingredientes:

• 1 manojo grande de acelgas
• 2 huevos grandes
• 1/2 taza de queso rallado (manchego, mozzarella o el que prefieras)
• 1/4 taza de pan molido
• 1 diente de ajo pequeño, picado muy finamente
• Sal y pimienta al gusto
• Aceite para freír

Instrucciones:

1. Lava muy bien las acelgas. Separa las hojas de los tallos. ¡No tires los tallos! Los usaremos en otra receta.
2. Hierve las hojas en agua con sal por unos 3-4 minutos, hasta que estén suaves. Escúrrelas muy, muy bien, apretando para sacar toda el agua posible.
3. Pica las hojas finamente. En un bol, mézclalas con los huevos, el queso rallado, el pan molido y el ajo. Sazona con sal y pimienta.
4. Forma pequeñas tortitas con las manos. Si la mezcla está muy húmeda, añade un poquito más de pan molido.
5. Calienta un poco de aceite en una sartén a fuego medio. Cocina las tortitas por ambos lados hasta que estén doradas y firmes. ¡Sírvelas calientes con un poco de yogur natural!

2. Acelgas a la Crema Clásicas

Un clásico que nunca falla. Es una guarnición cremosa y llena de sabor que acompaña perfectamente a un filete de pollo a la plancha o a un pescado.

Ingredientes:

• 1 manojo grande de acelgas
• 1 cucharada de mantequilla sin sal
• 1/2 cebolla pequeña, picada
• 1 diente de ajo, picado
• 1/2 taza de crema de leche (nata para cocinar)
• Una pizca de nuez moscada
• Sal y pimienta blanca al gusto

Instrucciones:

1. Lava y pica las acelgas (hojas y tallos tiernos). Hierve en agua con sal por 5 minutos. Escurre bien.
2. En una sartén, derrite la mantequilla a fuego medio. Sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén transparentes.
3. Añade las acelgas escurridas y saltea por un par de minutos.
4. Baja el fuego, vierte la crema de leche y añade la nuez moscada, sal y pimienta. Remueve suavemente y cocina hasta que la salsa espese un poquito. ¡Cuidado de no hervir la crema para que no se corte!

3. Garbanzos Guisados con Acelgas

Un plato de cuchara reconfortante, nutritivo y lleno de sabor. Perfecto para un día frío o cuando necesitas una comida que te abrace por dentro.

Ingredientes:

• 1 bote grande de garbanzos cocidos, enjuagados y escurridos
• 1 manojo de acelgas
• 1 cebolla mediana, picada
• 2 dientes de ajo, picados
• 1 tomate maduro, rallado
• 1 cucharadita de pimentón dulce
• 1 hoja de laurel
• 4 tazas de caldo de verduras
• Aceite de oliva, sal y pimienta

Instrucciones:

1. Lava las acelgas y pícalas en trozos medianos, separando hojas y tallos.
2. En una olla grande, calienta un chorro de aceite de oliva. Sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén dorados.
3. Añade los tallos de las acelgas y cocina por 5 minutos. Luego, incorpora el tomate rallado y el pimentón. Cocina por 2 minutos más.
4. Agrega los garbanzos, la hoja de laurel y el caldo de verduras. Lleva a ebullición y luego baja el fuego.
5. Deja que hierva suavemente por 15 minutos. Finalmente, añade las hojas de acelga y cocina por 5 minutos más, hasta que se ablanden. ¡Listo para servir!

4. Rollitos de Acelga Rellenos de Arroz y Lentejas

Una versión vegetariana y saludable de los clásicos rollitos de repollo. Son divertidos de hacer y quedan espectaculares en la mesa.

Ingredientes:

• 12 hojas grandes de acelga
• 1 taza de arroz cocido
• 1 taza de lentejas cocidas
• 1/2 cebolla, picada muy fina
• 1 zanahoria, rallada
• Un puñado de perejil fresco, picado
• Jugo de 1/2 limón
• Sal, pimienta y comino en polvo al gusto
• Salsa de tomate casera para servir

Instrucciones:

1. Lava las hojas de acelga con cuidado. Con un cuchillo, rebaja la parte más gruesa del tallo central para que sea más fácil enrollarlas.
2. Blanquea las hojas en agua hirviendo por solo 30 segundos. Sácalas inmediatamente y sumérgelas en agua con hielo para cortar la cocción y mantener el color. Sécalas con cuidado.
3. En un bol, mezcla el arroz, las lentejas, la cebolla, la zanahoria y el perejil. Sazona con el jugo de limón, sal, pimienta y comino.
4. Coloca una porción del relleno en la base de cada hoja de acelga y enrolla como si fuera un burrito, doblando los lados hacia adentro.
5. Coloca los rollitos en una vaporera y cocina al vapor por unos 10-12 minutos. Sírvelos calientes con una buena cucharada de salsa de tomate por encima.

Pro Tip: Si no tienes vaporera, puedes colocar los rollitos en una sartén grande con un dedo de caldo de verduras, tapar y cocinar a fuego bajo hasta que estén calientes.

5. Pesto de Acelgas y Nueces

¿Aburrido del pesto de albahaca? ¡Prueba esta versión! Es una forma genial de usar un montón de acelgas y el resultado es una salsa vibrante, nutritiva y deliciosa para tus pastas o para untar en pan tostado.

Ingredientes:

• 1 manojo grande de acelgas (solo las hojas)
• 1/2 taza de nueces
• 1/2 taza de queso parmesano o pecorino rallado
• 1-2 dientes de ajo
• 1/2 taza de aceite de oliva extra virgen
• Jugo de 1/2 limón
• Sal y pimienta negra recién molida

Instrucciones:

1. Blanquea las hojas de acelga en agua hirviendo por 1 minuto. Escúrrelas muy bien, apretando para quitar el exceso de agua.
2. En un procesador de alimentos o licuadora, coloca las acelgas, las nueces, el queso y el ajo. Pulsa varias veces hasta que todo esté bien picado.
3. Con el motor en marcha, añade el aceite de oliva en un hilo fino hasta obtener una consistencia cremosa.
4. Pasa el pesto a un bol, añade el jugo de limón y sazona con sal y pimienta al gusto. El limón ayuda a mantener el color verde brillante y equilibra los sabores.

6. Sopa de Lentejas Rojas y Acelgas

Una sopa rápida, ligera y llena de color. Las lentejas rojas se cocinan en un santiamén y combinan de maravilla con el sabor terroso de las acelgas.

Ingredientes:

• 1 taza de lentejas rojas, enjuagadas
• 1 manojo de acelgas, picadas
• 1 cebolla, picada
• 2 zanahorias, en cubitos
• 2 tallos de apio, en rodajas
• 6 tazas de caldo de verduras
• 1 cucharadita de cúrcuma
• 1/2 cucharadita de comino molido
• Aceite de oliva, sal y pimienta

Instrucciones:

1. En una olla grande, calienta un poco de aceite y sofríe la cebolla, las zanahorias y el apio hasta que estén tiernos.
2. Añade la cúrcuma y el comino, y cocina por un minuto más para que suelten su aroma.
3. Incorpora las lentejas rojas y el caldo de verduras. Lleva a ebullición, luego reduce el fuego y cocina a fuego lento por unos 15 minutos, o hasta que las lentejas estén suaves.
4. Añade las acelgas picadas y cocina por 5 minutos más. Sazona con sal y pimienta al gusto. ¡Sírvela con un chorrito de limón!

7. Buñuelos de Acelga al Horno

Más ligeros que los fritos, pero igual de sabrosos. Estos buñuelos son perfectos como aperitivo o para llevar en el tupper al trabajo.

Ingredientes:

• 1 manojo de acelgas, cocidas y muy bien escurridas
• 1 taza de harina de garbanzo (o harina de trigo)
• 1/2 taza de agua o leche vegetal
• 1 cucharadita de polvo para hornear
• 1/2 cebolla, rallada
• Sal, pimienta y orégano al gusto

Instrucciones:

1. Precalienta el horno a 200°C (400°F) y prepara una bandeja con papel para hornear.
2. Pica las acelgas cocidas muy finamente.
3. En un bol, mezcla la harina de garbanzo, el polvo para hornear y las especias. Añade el agua poco a poco, batiendo hasta obtener una masa espesa y sin grumos.
4. Incorpora las acelgas picadas y la cebolla rallada a la masa. Mezcla bien.
5. Con una cuchara, forma pequeños montoncitos de la mezcla sobre la bandeja para hornear.
6. Hornea por 20-25 minutos, dándoles la vuelta a mitad de cocción, hasta que estén dorados y firmes al tacto.

8. Lasagna de Acelgas y Requesón (Ricotta)

Una lasagna diferente, sin carne, pero increíblemente cremosa y satisfactoria. Las capas de acelga le dan una humedad y un sabor espectaculares.

Ingredientes:

• Láminas de lasagna (las que no necesitan cocción previa son más fáciles)
• 2 manojos de acelgas
• 500g de requesón (ricotta)
• 1 huevo
• 1 taza de queso mozzarella rallado
• 1/2 taza de queso parmesano rallado
• Salsa de tomate casera
• Sal, pimienta y nuez moscada

Instrucciones:

1. Cocina las acelgas, escúrrelas perfectamente y pícalas.
2. En un bol, mezcla el requesón con el huevo, la mitad del parmesano, sal, pimienta y una pizca de nuez moscada. Añade las acelgas picadas y mezcla todo bien.
3. Para montar la lasagna: en un molde para horno, pon una capa fina de salsa de tomate en el fondo. Cubre con una capa de láminas de lasagna.
4. Extiende una capa de la mezcla de acelgas y requesón. Cubre con otra capa de láminas de lasagna. Repite el proceso hasta terminar con los ingredientes, asegurándote de que la última capa sea de láminas de lasagna cubiertas con salsa de tomate.
5. Espolvorea por encima la mozzarella y el resto del parmesano.
6. Hornea a 180°C (350°F) por 30-40 minutos, o hasta que esté burbujeante y dorada por encima. Deja reposar 10 minutos antes de cortar.

9. Salteado Rápido de Acelgas con Ajo y Limón

La receta más sencilla y rápida del mundo. Ideal para una cena ligera o como guarnición de último minuto. En 5 minutos tienes un plato delicioso.

Ingredientes:

• 1 manojo de acelgas
• 2-3 dientes de ajo, en láminas finas
• Un chorrito de aceite de oliva
• Jugo de 1/2 limón
• Sal y hojuelas de chile (opcional)

Instrucciones:

1. Lava bien las acelgas y córtalas en trozos grandes. No hace falta secarlas del todo, el agua ayudará a cocinarlas al vapor.
2. Calienta el aceite en una sartén grande o wok a fuego medio-alto. Añade el ajo en láminas y sofríe por 30 segundos, hasta que empiece a oler bien pero sin que se queme.
3. Añade todas las acelgas de golpe. Puede que parezca mucho, pero se reducirán un montón. Tapa la sartén y cocina por 2-3 minutos.
4. Destapa, remueve y cocina por 1-2 minutos más, hasta que las hojas estén tiernas pero aún de un verde vibrante.
5. Retira del fuego, exprime el jugo de limón por encima, sazona con sal y hojuelas de chile si te gusta el picante. ¡A comer!

10. Croquetas Cremosas de Acelga

Si te gustan las croquetas, tienes que probar esta versión. El relleno queda súper cremoso y con un sabor a verdura muy suave y delicioso.

Ingredientes:

• Para la bechamel: 2 cucharadas de mantequilla, 2 cucharadas de harina, 2 tazas de leche, sal, pimienta y nuez moscada.
• 1 manojo de acelgas, cocidas, escurridas y muy picadas.
• Huevo y pan molido para rebozar.
• Aceite para freír.

Instrucciones:

1. Prepara la bechamel: derrite la mantequilla en una cacerola, añade la harina y cocina por un minuto (esto se llama roux). Ve añadiendo la leche poco a poco, sin dejar de remover con unas varillas para que no se formen grumos. Cocina hasta que espese. Sazona con sal, pimienta y nuez moscada.
2. Añade las acelgas picadas a la bechamel y mezcla bien. Vierte la masa en una fuente, cúbrela con film transparente (pegado a la superficie para que no haga costra) y déjala enfriar en la nevera por lo menos 4 horas, o mejor de un día para otro.
3. Una vez fría la masa, forma las croquetas con las manos.
4. Pásalas por huevo batido y luego por pan molido.
5. Fríelas en abundante aceite caliente hasta que estén doradas. Sácalas a un plato con papel de cocina para absorber el exceso de aceite.

11. Hummus de Acelgas

¡Una vuelta de tuerca al hummus tradicional! Añadir acelgas le da un color verde precioso, un extra de nutrientes y un sabor muy interesante.

Ingredientes:

• 1 bote de garbanzos cocidos, escurridos
• Un puñado grande de hojas de acelga frescas
• 2 cucharadas de tahini (pasta de sésamo)
• El jugo de 1 limón
• 1 diente de ajo
• Un chorrito de agua fría
• Sal y comino al gusto
• Aceite de oliva para servir

Instrucciones:

1. Lava bien las hojas de acelga.
2. En una licuadora potente o procesador de alimentos, pon los garbanzos, las hojas de acelga, el tahini, el jugo de limón y el ajo.
3. Tritura todo hasta que empiece a formarse una pasta. Con la máquina en marcha, añade un chorrito de agua fría. El agua fría ayuda a que el hummus quede más cremoso y esponjoso.
4. Sigue triturando hasta obtener la consistencia deseada. Sazona con sal y comino.
5. Sírvelo en un cuenco, haz un remolino con una cuchara, rocía con un buen chorro de aceite de oliva y espolvorea un poco de pimentón.

12. Caldo Verde con Acelgas y Patata

Una sopa tradicional portuguesa adaptada con acelgas. Es sencilla, económica y muy reconfortante. El secreto está en cortar las acelgas en tiras muy finitas.

Ingredientes:

• 1 manojo de acelgas
• 3 patatas medianas, peladas y en cubos
• 1 cebolla, picada
• 2 dientes de ajo, picados
• 6 tazas de caldo de verduras o agua
• Aceite de oliva
• Sal y pimienta

Instrucciones:

1. En una olla, sofríe la cebolla y el ajo en aceite de oliva hasta que estén blandos.
2. Añade las patatas y el caldo. Lleva a ebullición y cocina hasta que las patatas estén muy tiernas.
3. Mientras, lava las hojas de acelga, apílalas, enróllalas como un cigarro y córtalas en tiras muy, muy finas (corte chiffonade).
4. Cuando las patatas estén listas, retira la olla del fuego y tritura la sopa con una batidora de mano hasta obtener una crema suave.
5. Vuelve a poner la olla al fuego, lleva a ebullición y añade las tiras de acelga. Cocina solo por 2-3 minutos. Las acelgas deben quedar de un verde brillante y un poco crujientes.
6. Sazona con sal y pimienta. Sirve caliente con un chorrito de aceite de oliva por encima.

13. Tarta Salada (Quiche) de Acelgas y Champiñones

Una tarta salada siempre es una buena idea para una cena o un brunch. Esta combinación de acelgas y champiñones es terrosa, sabrosa y muy elegante.

Ingredientes:

• 1 base de masa quebrada o de hojaldre
• 1 manojo de acelgas, cocidas, escurridas y picadas
• 200g de champiñones, laminados
• 1 cebolla, en juliana
• 3 huevos
• 1 taza de crema de leche (nata para cocinar)
• 1/2 taza de queso rallado (gruyère o emmental son ideales)
• Sal, pimienta y tomillo fresco

Instrucciones:

1. Precalienta el horno a 180°C (350°F). Forra un molde para tarta con la masa y pínchala con un tenedor. Hornéala en blanco (sola) por 10 minutos.
2. Mientras, en una sartén, saltea la cebolla hasta que se caramelice. Añade los champiñones y cocina hasta que suelten toda su agua y se doren. Incorpora las acelgas picadas y el tomillo. Sazona y retira del fuego.
3. En un bol, bate los huevos con la crema de leche. Añade el queso rallado y salpimienta.
4. Extiende el relleno de acelgas y champiñones sobre la base de masa pre-horneada. Vierte con cuidado la mezcla de huevos por encima.
5. Hornea por 30-35 minutos, o hasta que el relleno esté cuajado y la superficie dorada.

14. Tallos de Acelga en Escabeche

¡No tires los tallos! Son deliciosos y se pueden convertir en un encurtido crujiente y sabroso, perfecto para añadir a ensaladas o como aperitivo.

Ingredientes:

• Los tallos de 2 manojos de acelgas
• 1 taza de vinagre de manzana
• 1 taza de agua
• 1 cucharada de sal
• 1 cucharada de azúcar (opcional)
• Granos de pimienta negra, semillas de mostaza, 1 hoja de laurel, 1 diente de ajo

Instrucciones:

1. Lava bien los tallos y córtalos en bastones del tamaño de tu frasco.
2. En una cacerola, lleva a ebullición el agua, el vinagre, la sal y el azúcar. Remueve hasta que se disuelvan.
3. Coloca los tallos de acelga en un frasco de vidrio esterilizado junto con las especias y el ajo.
4. Vierte el líquido caliente sobre los tallos hasta cubrirlos por completo.
5. Cierra el frasco y déjalo enfriar. Guárdalo en la nevera. Estarán listos para comer en 24 horas y se conservan por varias semanas. ¡Son adictivos!

15. Curry de Lentejas, Batata y Acelgas

Un curry cremoso, exótico y lleno de nutrientes. La dulzura de la batata contrasta perfectamente con el sabor de las acelgas y las especias.

Ingredientes:

• 1 taza de lentejas pardinas, enjuagadas
• 1 manojo de acelgas, picadas
• 1 batata (camote) grande, pelada y en cubos
• 1 lata de leche de coco
• 1 cebolla, picada
• 2 dientes de ajo, picados
• 1 trozo de jengibre fresco, rallado
• 2 cucharaditas de curry en polvo
• 4 tazas de caldo de verduras
• Arroz basmati para servir

Instrucciones:

1. En una olla grande, sofríe la cebolla, el ajo y el jengibre en un poco de aceite.
2. Añade el curry en polvo y cocina por un minuto. Incorpora la batata en cubos y las lentejas. Remueve bien.
3. Vierte el caldo de verduras y la leche de coco. Lleva a ebullición, baja el fuego y cocina a fuego lento por 25-30 minutos, hasta que las lentejas y la batata estén tiernas.
4. Añade las acelgas picadas y cocina por 5 minutos más.
5. Sazona con sal y sirve caliente sobre una cama de arroz basmati.

16. Huevos Revueltos con Acelgas y Feta

Un desayuno o cena rápida que te llenará de energía. La combinación del huevo cremoso, la acelga y el toque salado del queso feta es simplemente perfecta.

Ingredientes:

• 4 huevos
• Un buen puñado de hojas de acelga, picadas
• 50g de queso feta, desmenuzado
• Un chorrito de leche (opcional, para más cremosidad)
• Sal y pimienta
• Mantequilla o aceite de oliva

Instrucciones:

1. En una sartén a fuego medio, derrite un poco de mantequilla. Añade las acelgas picadas y saltéalas hasta que se ablanden.
2. Mientras, en un bol, bate los huevos con un chorrito de leche, sal y pimienta.
3. Vierte los huevos batidos sobre las acelgas en la sartén.
4. Remueve suavemente con una espátula. Cuando los huevos estén casi cuajados pero aún un poco húmedos, añade el queso feta.
5. Retira del fuego, remueve una última vez y sirve inmediatamente.

17. Empanadas de Acelga y Huevo Duro

Un clásico de la cocina argentina, perfecto para una comida informal o para llevar de picnic.

Ingredientes:

• 1 paquete de tapas para empanadas
• 1 manojo de acelgas, cocidas, escurridas y picadas
• 1 cebolla grande, picada fina
• 2 huevos duros, picados
• 1/2 taza de queso rallado
• Sal, pimienta y comino
• 1 huevo batido para pintar

Instrucciones:

1. En una sartén, sofríe la cebolla hasta que esté transparente. Añade las acelgas y cocina por un par de minutos. Retira del fuego y deja enfriar.
2. En un bol, mezcla el sofrito de acelgas con los huevos duros picados y el queso. Sazona generosamente con sal, pimienta y comino.
3. Rellena cada tapa de empanada con una cucharada de la mezcla. Humedece los bordes con agua, cierra y haz el repulgue (el borde trenzado).
4. Coloca las empanadas en una bandeja para horno, píntalas con huevo batido y hornéalas a 200°C (400°F) por 15-20 minutos, hasta que estén doradas.

18. Ensalada Tibia de Acelgas y Quinoa

Una ensalada completa y nutritiva que se puede comer como plato único. La combinación de texturas es fantástica.

Ingredientes:

• 1 manojo de acelgas
• 1 taza de quinoa cocida
• 1/4 taza de almendras fileteadas, tostadas
• 1/4 taza de arándanos secos
• Para el aderezo: aceite de oliva, vinagre balsámico, mostaza de Dijon, sal y pimienta.

Instrucciones:

1. Lava las acelgas. Pica los tallos y saltéalos en una sartén con un poco de aceite hasta que estén tiernos.
2. Añade las hojas de acelga a la sartén y cocina solo hasta que se ablanden un poco pero sigan crujientes.
3. En un bol grande, combina la quinoa cocida con las acelgas salteadas (aún tibias).
4. Añade las almendras tostadas y los arándanos secos.
5. Prepara el aderezo mezclando todos sus ingredientes y viértelo sobre la ensalada. Mezcla suavemente y sirve de inmediato.

19. Acelgas Rehogadas con Patatas y Pimentón

Un plato humilde, tradicional y lleno de sabor. Es la guarnición perfecta o incluso una cena ligera por sí sola.

Ingredientes:

• 1 manojo grande de acelgas
• 2 patatas medianas
• 3-4 dientes de ajo, en láminas
• 1 cucharadita de pimentón dulce (o picante, si te atreves)
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal

Instrucciones:

1. Pela las patatas y córtalas en rodajas finas. Cuécelas en agua con sal hasta que estén tiernas pero no se deshagan.
2. Lava y pica las acelgas. Cuécelas en la misma agua de las patatas durante los últimos 5 minutos de cocción. Escurre todo junto.
3. En una sartén grande, calienta un buen chorro de aceite de oliva. Dora los ajos laminados con cuidado de que no se quemen.
4. Retira la sartén del fuego y añade el pimentón. Remueve rápidamente para que no se amargue.
5. Vuelve a poner la sartén a fuego bajo y añade las patatas y acelgas escurridas. Rehoga todo junto por un par de minutos, mezclando con cuidado para que se impregnen bien los sabores. ¡Sirve caliente!

20. Frittata de Acelgas, Tomates Secos y Queso de Cabra

Una frittata es como una tortilla al horno, más gruesa y fácil de hacer. Esta combinación de sabores es sofisticada y deliciosa.

Ingredientes:

• 8 huevos
• 1 manojo de acelgas, salteadas y picadas
• 1/2 taza de tomates secos en aceite, escurridos y picados
• 100g de queso de cabra en rulo, en rodajas
• Un chorrito de leche o crema
• Sal y pimienta

Instrucciones:

1. Precalienta el horno a 180°C (350°F).
2. En un bol grande, bate los huevos con la leche, sal y pimienta.
3. Añade las acelgas salteadas y los tomates secos a la mezcla de huevo.
4. Vierte la mezcla en una sartén apta para horno (o en un molde redondo engrasado).
5. Coloca las rodajas de queso de cabra por encima.
6. Hornea por 20-25 minutos, hasta que esté inflada, dorada y cuajada en el centro.

21. Batido Verde Energizante con Acelgas

¡Sí, las acelgas también se pueden beber! En un batido, su sabor es muy suave y te llevas todos sus nutrientes de la forma más fácil.

Ingredientes:

• Un gran puñado de hojas de acelga frescas
• 1 plátano congelado
• 1/2 taza de piña en trozos
• 1 cucharada de semillas de chía
• 1 taza de agua de coco o leche vegetal

Instrucciones:

1. Lava bien las hojas de acelga.
2. Pon todos los ingredientes en una licuadora de alta velocidad.
3. Licúa hasta que la mezcla esté completamente suave y cremosa. Si está muy espeso, añade un poco más de líquido.
4. ¡Bebe inmediatamente para aprovechar al máximo sus vitaminas!

22. Risotto de Acelgas y Limón

Un risotto cremoso con un toque fresco y sorprendente. El limón levanta el sabor de las acelgas y hace que el plato sea menos pesado.

Ingredientes:

• 1.5 tazas de arroz Arborio o Carnaroli
• 1 manojo de acelgas, hojas picadas finamente
• 1 cebolla pequeña, picada fina
• 4-5 tazas de caldo de verduras caliente
• 1/2 taza de queso parmesano rallado
• La ralladura y el jugo de 1 limón
• Mantequilla y aceite de oliva

Instrucciones:

1. En una olla grande, calienta un poco de aceite y mantequilla. Sofríe la cebolla hasta que esté transparente.
2. Añade el arroz y tuéstalo por un minuto, hasta que los granos se vuelvan translúcidos en los bordes.
3. Añade un cucharón de caldo caliente y remueve constantemente hasta que el arroz lo absorba. Sigue añadiendo caldo, cucharón a cucharón, esperando a que se absorba antes de añadir el siguiente. Este proceso tarda unos 18-20 minutos y es la clave para un risotto cremoso.
4. Cuando al arroz le falten unos 5 minutos, añade las hojas de acelga picadas. Seguirán cocinándose con el calor.
5. Una vez que el arroz esté al dente (tierno pero con un punto firme en el centro), retira del fuego. Añade el queso parmesano, una nuez de mantequilla, la ralladura y el jugo de limón. Remueve enérgicamente para mantecar el risotto. Sirve de inmediato.

23. Pasta con Acelgas, Ajo y Anchoas (Versión sin Anchoas)

Esta es una adaptación del clásico italiano, usando alcaparras para conseguir ese toque salado y umami sin usar pescado.

Ingredientes:

• 300g de tu pasta favorita (spaghetti o penne van genial)
• 1 manojo de acelgas, picadas
• 4 dientes de ajo, en láminas
• 1 cucharada de alcaparras, enjuagadas
• Hojuelas de chile al gusto
• Aceite de oliva extra virgen
• Queso parmesano rallado para servir

Instrucciones:

1. Cocina la pasta según las instrucciones del paquete. Guarda una taza del agua de cocción antes de escurrirla.
2. Mientras se cuece la pasta, calienta un buen chorro de aceite en una sartén grande. Sofríe el ajo y las hojuelas de chile hasta que el ajo empiece a dorarse.
3. Añade las acelgas y las alcaparras. Saltea hasta que las hojas se ablanden.
4. Añade la pasta cocida a la sartén junto con un chorrito del agua de cocción que reservaste. El almidón del agua ayudará a crear una salsa ligera que una todo.
5. Saltea todo junto por un minuto. Sirve inmediatamente con una generosa cantidad de queso parmesano por encima.

24. Crema Fría de Acelgas y Aguacate

Perfecta para el verano. Una sopa fría, cremosa, refrescante y súper saludable.

Ingredientes:

• 1 manojo de acelgas (solo las hojas)
• 1 aguacate maduro
• 1/2 pepino, pelado y en trozos
• El jugo de 1 lima
• Un puñado de cilantro o menta fresca
• 1 taza de caldo de verduras frío o agua
• Sal y pimienta

Instrucciones:

1. Blanquea las hojas de acelga en agua hirviendo por 30 segundos y luego pásalas a agua con hielo. Escúrrelas bien.
2. En una licuadora, pon las acelgas, la pulpa del aguacate, el pepino, el jugo de lima y las hierbas frescas.
3. Añade el caldo frío y tritura hasta obtener una crema muy fina y homogénea.
4. Sazona con sal y pimienta. Refrigera por lo menos durante 1 hora antes de servir. Puedes decorarla con unas semillas de sésamo o un chorrito de aceite.

25. Salteado de Tallos de Acelga Estilo Asiático

¡La revancha de los tallos! Esta receta los convierte en los protagonistas con un salteado rápido, crujiente y lleno de sabor.

Ingredientes:

• Los tallos de 1-2 manojos de acelgas, cortados en diagonal
• 1 cucharada de salsa de soja
• 1 cucharadita de aceite de sésamo
• 1 diente de ajo, picado
• 1 trocito de jengibre, rallado
• Semillas de sésamo tostado para decorar

Instrucciones:

1. En un wok o sartén grande, calienta un poco de aceite vegetal a fuego alto.
2. Añade los tallos de acelga y saltea por 3-4 minutos. Queremos que se ablanden un poco pero que sigan crujientes.
3. Añade el ajo y el jengibre y saltea por 30 segundos más.
4. Vierte la salsa de soja y el aceite de sésamo. Remueve bien para cubrir todos los tallos.
5. Sirve inmediatamente, espolvoreado con semillas de sésamo. ¡Es una guarnición increíble!

Preguntas Frecuentes sobre las Acelgas (FAQ)

1. ¿Cómo debo lavar y preparar las acelgas? Es muy importante lavarlas bien, ya que pueden tener tierra entre las hojas y los tallos. La mejor forma es sumergirlas en un bol grande con agua fría y agitarlas un poco. Luego, enjuágalas bajo el grifo. Para prepararlas, generalmente se separa la hoja del tallo (penca), ya que los tallos son más duros y necesitan más tiempo de cocción.

2. ¿Se pueden comer los tallos de las acelgas? ¡Claro que sí! Son deliciosos y muy nutritivos. Son crujientes y tienen un sabor suave. Se pueden cocinar junto con las hojas (añadiéndolos a la cocción unos minutos antes) o usarlos en recetas específicas como salteados, encurtidos o incluso gratinados. ¡Nunca los tires!

3. ¿Cuál es la mejor forma de guardar las acelgas para que duren más? No las laves hasta que vayas a usarlas. Guárdalas en el cajón de las verduras de la nevera, envueltas en una bolsa de plástico perforada o en un paño de cocina ligeramente húmedo. Así pueden durar frescas hasta 5-7 días.

4. ¿Puedo congelar las acelgas? Sí, se congelan muy bien. Para ello, primero debes blanquearlas: sumerge las hojas (y los tallos si quieres) en agua hirviendo por 2 minutos y luego en agua helada para cortar la cocción. Escúrrelas muy, muy bien, sécalas y guárdalas en bolsas de congelación. Son perfectas para añadir directamente a sopas, guisos o salteados.

5. ¿A qué saben realmente las acelgas? Las hojas tienen un sabor suave y terroso, un poco parecido a la espinaca pero quizás un poco más amargo y robusto. Los tallos son más suaves, con una textura crujiente similar a la del apio y un ligero sabor salado. Su sabor es muy versátil y combina bien con muchísimos ingredientes.

Conclusión: El Secreto Mejor Guardado de tu Nevera

Espero que este viaje por el mundo de las acelgas te haya abierto el apetito y la imaginación. Como has visto, esta humilde verdura es un verdadero camaleón en la cocina, capaz de transformarse en platos reconfortantes, elegantes, rápidos o exóticos. Pero más allá de las recetas, el verdadero secreto es atreverse a experimentar. La próxima vez que veas un manojo de acelgas de colores vibrantes en el mercado, no lo dudes. Llévalo a casa y recuerda que no solo estás comprando una verdura, sino un montón de posibilidades deliciosas y saludables. El verdadero truco no está en una receta, sino en la confianza para hacerla tuya.

Fuentes para Curiosos

• Nutritional Value of Swiss Chard: USDA FoodData Central – https://fdc.nal.usda.gov/ (Busca “Swiss chard, cooked”)
• Health Benefits of Leafy Greens: “Cardiovascular Benefits of Dark Green Leafy Vegetables” – Journal of the American College of Nutrition.
• General Cooking Techniques: “On Food and Cooking: The Science and Lore of the Kitchen” by Harold McGee.